Las compañías low cost, ayudaron a que los más desfavorecidos pudieran salir a comer con frecuencia, a viajar por todo el mundo, a comprar low cost, y también ayudaron a un buen clima económico.
Un buen día deja de llover maná, y empieza a salir el sol, un sol que día a día y mes a mes, seca todo tipo de actividad económica y que año a año, nos deja a todos exhaustos y sin fuerzas. Todos se echan las culpas, unos a los otros y todos dicen lo que tendríamos que haber hecho y lo que ahora tenemos que hacer, pero todo pasará por volver a los orígenes y hasta que el rio no vuelva a su cauce, no podremos empezar un nuevo modelo que pasa por la sostenibilidad del mundo.
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